Todo empezó con una entrada en la que se dudaba de las intenciones de un supuesto Observatorio de Internet. Tras echar un vistazo al código fuente, Galli comenta lo que encuentra. Acto seguido recibe la amenaza de la rectora de la Universidad de las Islas Baleares, piediendo que borre una entrada que habla de algo real y documentado.
La solución de Ricardo fue la de mantener la coherencia y crearse un nuevo blog en WordPress.com. Triste e increíble.